miércoles, 30 de enero de 2013

UN MAL DÍA

Hoy no es un día como los demás,  hoy me llueve dentro y se me derrama la tristeza toda como ríos de sal infinita que se desbordan sin cesar. Será porque hoy es lo que llaman un mal día y no tengo unos brazos en los que refugiarme, no tengo otro cuerpo, otras manos, otros labios que me aseguren que no ocurre nada, que todo va bien, , que me diga que toda esta lucha sirve para algo, que me mienta ¡¡ por Dios !! que me mienta, quiero que me mientan y me acunen como una niña para calmar este dolor que hoy asola mi alma y no la deja en paz.
                         Estoy cansada, cansada de perder de a poco todo lo que me importaba, cansada del dolor físico que durante años no me ha dejado, de la incertidumbre, los quirófanos y esta vida que nunca imaginé como mía y a la que forzosamente me he tenido que acostumbrar. Cansada de luchar por seguir soñando porque quien no sueña no vive, cansada de sonreír cuando me muero por dentro y no puedo más con esta lucha absurda en la que no hay vencedores ni vencidos, tan sólo un doloroso camino que transitar en soledad que desde el principio yo se muy bien hacia donde me conduce.
                           Veo desde mi balcón a la gente ir y venir y me siento una intrusa, sobrevivo ¿ para que ? he perdido mi derecho a que nadie pueda enamorarse de mi, soy una apestada porque la muerte me ronda y baila mofándose a mi alrededor. Vivo en este silencio interior que todo lo ocupa evitando mirar hacia atrás y ver el pasado que me sonríe con la ironía de quien se siente valioso, sin embargo, a veces me asomo por una pequeña rendija y veo esa mujer plena, bella y feliz que fui y una perla de cristal se escapa  de esa mirada al tiempo que ya nunca ha de volver.
                               Hoy es un mal día , si, un día de esos en los que todo se vuelve oscuro, gris, en los que la esperanza se ha tomado el día libre cansada de enarbolar su bandera  cada mañana, cada despertar. La fe, la sonrisa, la fuerza de voluntad, mis mejores puntales han caído esparcidos por el suelo, estoy muy cansada de luchar.
                               Pero mañana amanecerá un nuevo día y quizás, lo más probable es que vuelva a ver todo de otra manera, recobre las fuerzas perdidas y logré seguir hacia adelante sin mirar más hacia atrás. Supongo que hoy sólo ha sido un mal día, uno de tantos, sólo uno más.

                                                                                     Carmen Duarte, 2013

                               

viernes, 28 de septiembre de 2012

TIEMPO



Hoy me permito jugar, cerrar los ojos
soñar que soy viento,
el mismo que recio, murmura y protesta 
en las noches de gélido  invierno.
Soñar que de la llena luna , soy luz
que ilumina los besos más apasionados,
 fugaz estrella,  que da aliento 
al deseo más insospechado.
Primavera que de improviso estalla
de excelsos coloridos,
alfombrando los campos.

Hoy me permito jugar, cerrar los ojos
soñar que soy risa,
la misma que es pura alegría
y con quienes me quieren comparto.
Soñar que voy ganando la guerra
 aunque sólo sea una tregua.
entre tanto descalabro.
Soñar por un sólo instante , 
¡ se acabó la lucha !.
Ser feliz, celebrarlo...

Hoy la vida me ha hecho 
el mejor de los regalos,
me ha concedido, de nuevo, tiempo...
Tiempo para vivir y seguir soñando.
                                                                                                      

                                                                                            Carmen Duuarte, 2012


viernes, 11 de mayo de 2012

REFLEXIONES





                                                   El valor de las cosas no está en el tiempo que duran sino en la intensidad con que suceden. Por eso existen momentos inolvidables, cosas inexplicables y personas incomparables.


                                                                                                        Anónimo.




                                                 La belleza de una mujer no está en la moda superficial. La verdadera belleza de una mujer se refleja en su alma, en la bondad con la que da amor y en la pasión que demuestra.




                                                                                                                                    
                                                                                                      Audrey Hepbur.




                                               Hay dos tipos de personas, los que hacen cosas y los que hablan como los loros. Quédate en el primer grupo, seguro que encuentras menos competencia ahí.




                                                                                                      Indira Gandhi.

lunes, 30 de abril de 2012

SOLEDAD




Dormí un sueño blanco
y te esperé.
Me soñé pura y virgen
como entonces, 
virgen entre los sueños de la añorada juventud.
No quise espejos delatores,
ni finos peines nacarados.
Mi cabello se tornó ralo,
ajado mi corazón.
Te soñé y aún espero
anclada en la vida,
sintiendo el paso de las brisas ajenas
reseco el vientre,
viejos los años
cansados de esperanzas viejas.
Labios, sedientos, de besos
que nunca llegaron.
firmes, en la tierra, mis raíces están
en la profundidad de este bosque perdido, 
en donde el olvido, me envuelve con su manto de eternidad.


                                                                    Carmen Duarte, año 2012                                             

domingo, 25 de marzo de 2012

CRECER

                                                   
                                     
                                                A veces uno transita por la vida, taciturno, cabizbajo y todo aquello que trasmite no es más que desánimo y tristeza. En ocasiones hay quien transita intransigente, falto de flexibilidad y la soledad va cercándole hasta acorralarle en un rincón del camino.
                                                 La vida es un cambio continuo, un devenir constante en el que adquirimos la responsabilidad de aprender de nuestra propia grandeza para que el paso por este mundo adquiera un significado único.
                                                 Uno crece cuando aprende que nadie es responsable de las serias dificultades que nos plantea la vida, que nadie es perfecto, que el error forma parte de la naturaleza humana pero que hacer daño gratuitamente a un semejante también forma, por desgracia, parte de la misma porque no tenemos peor enemigo que nosotros mismos.
                                                  Sin duda es doloroso dejar el lastre de tantas y tantas creencias absurdas sobre nosotros mismos, unas porque nos las han enseñado, otras porque las hemos querido creer cuando nos las han dicho ... ¡ que importa !. 
                                                    Lejos de toda opinión ajena, en nuestro silencio interior es donde mejor podemos llegar a conocernos y reconocernos en nuestros más íntimos deseos ya que si nada pasa por casualidad, finalmente somos nosotros en última instancia los hacedores de nuestro destino.
                                                   Crecer es evolucionar, adaptase, ser lo suficientemente sabio e inteligente como para adoptar las propuestas, las nuevas ideas, lo positivo, lo mejor para uno de cada situación sin mirar hacia atrás. Tener la suficiente fe en uno mismo como para sentir que puede lograr tocar las estrellas si se lo propone.
                                                    Crecer es dejar atrás el rencor y amarte lo suficiente como para cuidarte y mimarte porque la ira, el dolor y todo aquello que daña tu corazón también daña tu salud. Hay que sentirlo, dejarlo fluir y marchar en paz. Así como aprender lo saludable que es el perdón, difícil, sin lugar a dudas, pero muy saludable, no sólo perdonar a quien nos ha dañado sino a nosotros mismos ya que la culpa es una enemiga incansable que nos acecha sin cesar.
                                                    Crecer es saberte merecedor de estar vivo, de recibir amor, de la alegría, de la amistad, de la familia. Todos somos seres de luz, únicos y excelsos, somos irrepetibles, con algo maravilloso que aportar.
                                                     Puede que la vida sea una carrera pero lo importante no es el llegar a la meta, lo importante es el como decidimos llegar si por el camino que entraña todas y cada una de las dificultades y también los gozos de vivir o por el atajo, acorralados, cabizbajos, solos y enfadados.
                                                    Hay quien por ofenderme, en un pasado no muy lejano, en varias ocasiones y publicamente me llamó vehemente, quizás nunca buscó esa palabra en el diccionario porque una de sus acepciones es " persona ardiente y llena de pasión ". Me encanta serlo y deseo seguir siéndolo, no quiero cambiar la esencia de lo que soy. Por ello, por mi forma de ser, por lo aprendido a mi me gusta el camino, tropezar y caer, reír y llorar, amar,equivocarme y rectificar, sentirme viva y ante todo sentirme un ser de luz único que se esfuerza cada día en crecer un poquito más y más  porque poniendo toda la fe del mundo en mi misma se que aunque tan sólo sea con la punta de mis dedos, voy a lograr tocar las estrellas.




                                                                                                     Carmen Duarte, Año 2012

lunes, 19 de marzo de 2012

SIN TÍTULO




Allí en donde nadie llegó
entraste con cautela, de puntillas
y en la tierra fría y desolada
plantaste una semilla.
Desvelaste un pensamiento
un halo fugaz de alegría
y dos haces solitarios,
rebosaron de caricias.
No te pudo postergar el tiempo
ni de la distancia, su divisa.
Allí quedó palpitante
el torrente desbordado de tu risa
y aún se percibe el rumor
de las aguas delirantes del encuentro
en donde fue navegando la dicha.
¡ Destino a deshora !
Allí en donde nadie llegó
quedó por siempre , tu esencia cautiva
velando en cada luna
de ese oasis ilusorio,
que de tu brisa
un suspiro enamorado,
consiguió darle la vida.


                                                                    CARMEN DUARTE,  Año 2000


sábado, 17 de marzo de 2012

NO DESEO...


No deseo a mi corazón indolente
ni un camino sin pensar,
no quiero que me vendan mentiras
disfrazas de verdad.
Aún siento y encuentro un ser humano
anhelante por clamar
ante el deambular de la mísera injusticia,
la fragante iniquidad.
Que mis manos se eleven siempre 
por la cruel desesperanza
la maligna indignidad,
que no me pasen de largo
el galopar del caballo
las muertes anónimas, sin justificar.
Que nunca se desvíe mi mirada
por miedo o comodidad.
Y así ...
Que mi voz inconforme rompa el silencio
ante la masacre gratuita
la malnacida amenaza,
la tangible soledad.
Que me asombre todo ello 
conservando la capacidad
de agrietar las aristas del prisma
a través del cual se nos enseña
a vivir dando la espalda,
al fondo más oscuro
de nuestra mansa realidad.


                                                                 Carmen Duarte, Año 1998